SIMONE DE BEAUVOIR: PODCAST LILA 83

«El segundo sexo es una obra fundamental del feminismo moderno. Algunos críticos de la época la consideraron como pornografía y el Vaticano la incluyó en la lista de libros prohibidos.

Simone de Beauvoir, una mujer que desde bien joven supo que quería ser escritora y lo consiguió.

Su pensamiento y su forma de vivir en el amor revolucionaron las ideas prefijadas sobre la mujer.»

Descúbrela en nuestro Podcast Lila 83  👇 👇 👇

¿Sabías qué Simone de Beauvoir fue una filósofa, escritora y profesora francesa luchadora por la igualdad de derechos de la mujer?

Pues así es.

Simone de Beauvoir supo desde los 15 años que quería ser escritora y lo consiguió

Fue independiente económicamente y se dedicó a lo que amaba. Escribió novelas, ensayos, biografías y monografías sobre temas políticos, sociales y filosóficos.

Sus obras se enmarcan en la corriente filosófica del existencialismo y ofrecen una visión reveladora de su vida y de su tiempo poniendo a la mujer en el centro del debate

Simone de Beauvoir describía a una sociedad en la que se relegaba a la mujer a una situación de inferioridad (te suena eso, ¿verdad?)

“El feminismo es una forma de vivir individualmente y de luchar colectivamente.”
Simone de Beauvoir
Simone de Beauvoir

Su obra El segundo sexo se considera fundamental en la historia del feminismo moderno.

Pero, repasemos un poco su historia….

Simone Ernestine Lucie Marie Bertrand de Beauvoir nació en 1908 en París, en el seno de una familia burguesa con una moral cristiana muy estricta.

Desde bien pequeña mostraba su desacuerdo con estos valores cristianos pero sería en su adolescencia cuando se rebelaría declarándose atea…luego te lo cuento…

Simone tuvo una hermana pequeña Hélène de Beauvoir, con quien mantuvo siempre una estrecha relación y fueron educadas en colegios católicos.

Sus padres fueron Georges Bertrand de Beauvoir, que trabajó un tiempo como abogado y Françoise Brasseur, una mujer profundamente religiosa y de buena familia. Tanto es así que su padre, Georges de Beauvoir, planeó vivir con el dinero de su esposa y de su familia pero vio sus planes frustrados…

Eso provocó que su infancia no fuese del todo fácil. Su familia cayó en la ruina por culpa de las malas inversiones de su padre. Se trasladaron a un piso sin ascensor ni agua corriente en París.

Toda su infancia estuvo marcada por el hecho de haber nacido mujer: su padre no le escondió el hecho de que hubiese deseado un hijo. Muchas veces le comentó a su hija: «Tienes un cerebro de hombre».

Menos mal que sus padres compartían la convicción de que, a pesar de la mala condición económica en la que se hallaba la familia, la única esperanza de mejora social para sus dos hijas eran los estudios.

Así, ella y su hermana Hélène siguieron recibiendo una educación elitista y católica, doctrina que una joven Simone de 15 años rechazó con convencimiento.

En sus memorias relata cuándo perdió la fe y también cuenta que su madre nunca le acabó de perdonar su visión de la religión como una forma más de subyugar al ser humano.

Su pensamiento liberal y de izquierdas la alejó de su familia, especialmente de su madre y del círculo de amigos al que supuestamente pertenecía.

Simone aprobó el bachillerato en 1925 y recibió una amplia educación en materias de ciencias y de letras, decantándose por las materias de letras. Pronto consiguió emanciparse y empezó estudios de filosofía y letras en la Universidad de París, la Sorbona. Se licenció en 1929, tras haber aprobado también unas certificaciones de ética y de psicología.

Fue a lo largo de su período universitario en París que Simone conoció a Jean-Paul Sartre que calificó con admiración de genio y de ahí surgió una relación única y auténtica.

Una relación abiertamente adelantada a su época. Simone será su «amor necesario», en oposición a los «amores contingentes» que los dos conocerán de forma paralela. Establecieron un pacto de polifidelidad para una relación abierta.

Simone de Beauvoir y J.P.Sartre no se separaron desde que se conocieron, ni durante la separación de ésta de su familia.

Simone de Beauvoir y JeanPaul Sartre en Beijing

Su relación perduró hasta la muerte de Sartre en 1980. Y nunca se casaron, ni vivieron bajo el mismo techo, ni tuvieron hijos. Este tipo de relación amorosa abierta y moderna se cimentaba en el rechazo profundo y visceral del modo de vida burgués.

A partir de 1929 empieza su periplo como profesora. Primero obtuvo una plaza como profesora titular en Marsella y más adelante fue profesora en diferentes centros educativos. En alguno de ellos tuvo problemas con algunos padres de sus alumnos al recriminarle que les metía ideas demasiado abiertas en su cabeza.

Con J.P. Sartre viajó por países comunistas, conoció a sus líderes  y fundaron la revista Les temps modernes, un referente cultural y político del pensamiento francés de la segunda mitad del siglo XX.

Simone de Beauvoir se decide a publicar su 1ª obra en 1943. Se trata de su primera novela, La invitada (1943), donde exploró los dilemas existencialistas de la libertad, la acción y la responsabilidad individual, después publica La sangre de los otros (1944) y Los mandarines (1954), novela por la que recibió el Premio Goncourt.

Pero antes de recibir ese premio, en 1949, después de la 2ª guerra mundial y en una época en la que se había vuelto a recluir a las mujeres al hogar, Simone de Beauvoir publicó una gran obra.

Se trata de El segundo sexo: una obra que causó gran revuelo en Francia y en otros países como EEUU y que que llegó a vender muchas ediciones pero que tuvo numerosas y feroces críticas.

Podemos decir que hasta 10 años más tarde no empezó a calar ampliamente en la sociedad.

“Este mundo ha pertenecido siempre a los hombres. ¿Dónde está la raíz de esa desigualdad? ¿Por qué la mujer no es tan libre como debiera serlo?

Son las preguntas de las que parte Simone De Beauvoir para escribir la obra cumbre del pensamiento feminista.

Con esta gran obra, Simone de Beauvoir recurre a la historia, la antropología, la literatura y a los más diversos conocimientos científicos, para constatar que las mujeres son definidas desde una perspectiva masculina que se reserva para sí misma el estatuto de la universalidad, de la trascendencia, identificando la feminidad con la esfera corporal, con lo particular.

Realmente, las ideas que reivindica el texto siguen siendo hoy en día de plena actualidad.  

Simone De Beauvoir sostiene que «la mujer», tal como la definía la sociedad occidental de su tiempo, es una construcción cultural. Como resumen de este pensamiento escribió una de sus frases más célebres:

"No se nace mujer, se llega a serlo".
Simone de Beauvoir

Nos dice Simone de Beauvoir que la mujer existe como objeto antes que como sujeto, como alguien con una naturaleza biológica que la constriñe y por la que es vista y evaluada (y esto no ha cambiado todavía).

Ella decía: «No olvides jamás que bastará una crisis política, económica o religiosa para poner en cuestión los derechos de las mujeres.»

Añade que, a lo largo de la historia, la mujer ha sido definida en relación al varón como madre, esposa, hija o hermana; por lo cual, sostiene, la principal tarea de la mujer es reconquistar su propia identidad específica, desde sus propios criterios.

Cuántas veces habrás oído hablar de: ”Simone de Beauvoir, esposa de…compañera del filósofo….”, sin darle importancia a su propio valor. Eso lo reflejará en su obra y nos lo recuerda así: “Él es el Sujeto, es el Absoluto: ella es la Alteridad”.

Y es que, ¿ te has parado a pensar por qué nadie se había preguntado por qué la palabra “hombre” designa a la parte masculina de la humanidad y a la humanidad entera como género? En cambio, la experiencia femenina se ha declinado siempre en singular. La mujer representa a la mujer (o a las mujeres), pero nunca a toda la humanidad

Todo eso se lo planteó Simone de Beauvoir en su obra y añadía: «No se trata de un enfrentamiento entre sexos, sino de una igualación, de ponerse al mismo nivel que los hombres.»

Simone de Beauvoir definió el feminismo en 1963 como una manera de vivir individualmente y una manera de luchar colectivamente.

Ya en la década de los 70, Simone publica La vejez (1970), centrada en la situación de la ancianidad en el imaginario occidental y en donde criticó su marginación y ocultamiento, y La ceremonia del adiós (1981), polémica obra que evoca la figura de su compañero de vida, Jean Paul Sartre.

Obras autobiográficas, cuatro en total, entre las que destacan Memorias de una joven de buena familia (también conocida como Memorias de una joven formal) (1958) y Final de cuentas (1972).

Simone, en línea con sus principios, no podía entender la literatura sin compromiso político por eso tuvo también un papel determinante en la legalización del aborto en Francia.

Fue una de las redactoras del Manifiesto de las 343 -firmado por mujeres de la política, la cultura y distintas áreas de la sociedad que reconocían haber abortado.

Durante su activismo político, se posicionó en contra del dominio colonial francés en Argelia y de la situación de maltrato sufrido por la mujer durante esa guerra. También de la guerra de Vietnam y participó de manera activa en las protestas del Mayo del 68.

En esas manifestaciones conoció a una joven estudiante de filosofía, Sylvie le Bon con quien estableció una fuerte relación de amor y de amistad. Más adelante, Simone adoptó oficialmente a Sylvie y la nombró heredera de su obra literaria y de sus bienes.

Simone de Beauvoir y Sylvie le Bon

Nuestra protagonista no dejó nunca de escribir y de actuar en pro de la mujer.

En 1986, con 78 años de edad, falleció en su casa de París.

ACTUALIDAD SOBRE SIMONE DE BEAUVOIR

Primero de todo, gracias a su obra.

Este año 2021 su albacea, Sylvie Le Bon, ha permitido que otro de sus textos, bajo el título de Las inseparables, vea la luz y llegue a las librerías. Se trata de un relato basado en la relación de amistad con su amiga Zaza que murió muy joven.

En 2008, con motivo del centenario del aniversario de su nacimiento, se creó en su honor el Premio Simone de Beauvoir por la Libertad de las Mujeres a iniciativa de Julia Kristeva financiado por la Universidad Diderot de París con un montante de 20 000 euros para destacar a las personas comprometidas por su obra artística y su acción a promover la libertad de las mujeres en el mundo.